Estimado Andrés Manuel López Obrador, Presidente de México. Aprovecho mi espacio de columnista para escribir ésta carta para ti. Como todo lo que escribo acá, lo hago a título personal.

Con éste escrito pretendo informar  la situación sobre un tema de gran importancia para los sonorenses: el servicio médico que brinda el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales del Estado de Sonora, ISSSTESON.

¡Caray, cuánto tiempo ha pasado! Cuanto tiempo desde la última vez que nos sentamos en la misma mesa para conversar sobre el sentido y la ruta de tu campaña en Sonora, amigo querido. Ese día presentaste tu libro “La Mafia que se adueñó de México y el 2012” y nosotros los de Radio Amlo transmitimos en vivo tu presentación toda la tarde, tal vez seis o siete horas sin parar. No quisiste dejar un solo libro sin firmar y nosotros esperamos hasta dejar plasmada tu última letra. Después tuviste una entrevista de televisión y finalmente mis amigos activistas sociales y yo acudimos al llamado de Alfonso para reunirnos contigo.

El tiempo ha pasado, Andrés Manuel: ¡Eres el Presidente de México! El más caro anhelo de millones de mexicanos se consumó gracias a tu empecinada perseverancia, gran virtud la tuya. Recibe nuevamente desde mi corazón la felicitación y el agradecimiento por el cargo que ocupas, y digo nuevamente porque ya te felicité mil veces en mi mente.

Te platico: En el tema de la salud, Sonora no es la excepción en cuanto a servicios médicos se refiere. Hace décadas que los gobiernos de éste Estado al igual que en el resto del país, han implementado un modelo neoliberal para la atención médica. La clase política de nuestro Estado ha antepuesto inversiones millonarias a proyectos políticos y comerciales que lesionan los intereses del pueblo, han vivido a expensas de robar destinando dinero para ellos y no para la ciudadanía. El tema de la salud en Sonora ha sido relegado, la calidad de los servicios en Isssteson se merma hasta llegar a la quiebra, los gobiernos gozan de privilegios que son lesivos para la ciudadanía. El actual gobierno de Sonora no ha sido la excepción.

Cito por ejemplo, puedo dar fe que muchísimas veces si un funcionario se enferma lo internan en un servicio médico particular y es el Issssteson el que absorbe los millonarios gastos de su atención.

Actualmente el Hospital Ignacio Chávez, que es parte del Instituto, se encuentra en sus peores condiciones. Ni médicos ni enfermeras tienen suficiente material para realizar sus funciones, incluso he sido testigo de que a los pacientes los envían a comprar material para ser atendidos.

Regularmente las cirugías en quirófano se posponen por falta de material. Los pensionados y jubilados han sido burlados en sus pagos, los retrasos para recibir sus pensiones son lo más común. ¡Vieras qué tristeza es ver a mujeres y hombres envejecidos haciendo largas filas en los cajeros bancarios en espera de su dinero! Ancianos que merecen todo el respeto de la autoridad y sin embargo son burlados al grado de mantenerlos haciendo fila día a día para recibir su dinero. Ni siquiera las altas temperaturas son motivo de comprensión para la autoridad… ¡Caray!

Ante éstas circunstancias las autoridades de salud apenas dan la cara, brindan explicaciones que se han vuelto retóricas. En la explicación que dan ante las distintas problemáticas del servicio médico, la constante es la misma, culpar a los derechohabientes. Declaran que las cuotas del patrón sea quien fuere, no se pagan, que las aportaciones de los trabajadores son muy bajas.

Cuando esto sucede pienso entre mí, “bola de inútiles”. ¿Cómo es que con tantos millones destinados a salud no son capaces de hacer un plan que involucre a las distintas dependencias para resolver las carencias que están llevando a los derechohabientes a la muerte?

La respuesta es muy sencilla, creo que se están robando el dinero. ¡Cuánta razón tienes, Andrés Manuel, cuando dices que la corrupción es el mayor mal en nuestro país!

En los últimos dos sexenios en Sonora, el desabasto de medicamento en farmacias de Isssteson está fuera de toda proporción. La crisis llegó con el exgobernador Guillermo Padrés. Lejos de solucionar el problema, el Gobierno de Claudia Pavlovich ha sido incapaz de arreglar la situación, ella dice que el problema son las desmedidas pensiones que se dieron a la derechohabiencia en el pasado, motivo por el cual el organismo se queda sin dinero.

¿Sabías, señor Presidente, que el Isssteson paga jubilaciones de 170 mil pesos mensuales? ¿Sabías que en su mayoría, por no decir todos, son exfuncionarios priistas? ¿Sabías que mientras a jubilados maestros, enfermeras o simples empleados del estado no les pagan su pensión a tiempo, y que a exfuncionarios que estuvieron en el cargo no más de seis años se les da una remuneración de más de cien mil pesos mensuales? Es indignante, amigo querido.

La cosa es que ante las distintas demandas por surtir medicamentos, -plantones, pleitos, marchas y negociaciones distintas- el Gobierno Estatal no ha podido resolver el problema, los estantes de farmacias están semivacíos permanentemente. Luego, dos o tres días traen medicamento y de nuevo viene la escasez.

No hay medicamento para controlar la diabetes, la hipertensión, ni medicamentos controlados para adultos mayores aunado a un etcétera interminable, incluidos reactivos de laboratorio y alergias, lo que tiene a nuestros padres y nuestros hijos en permanente amenaza pues es claro que en el desierto las enfermedades respiratorias son mucho más agudas. Ya ni te digo de medicamentos para enfermedades crónico degenerativas.

Ante tal situación, a finales de enero hicimos una marcha solicitando el Rescate Financiero del Isssteson, asistió muchísima gente. Con ésta medida de presión y con la determinación de ir a paro estatal por parte de los sindicatos afiliados, si  no se atendía el problema, finalmente se consiguió que aparecieran las autoridades. Se logró una reunión con funcionarios del Gobierno del Estado, Secretario de Gobierno, Secretario de Hacienda, Tesorero y Director de Isssteson, entre otros.

Líderes sindicales y derechohabientes en general, asistimos. De la reunión existe video, ¡los hubieras oído, puedes oírlos todavía señor Presidente! Ni más ni menos que los funcionarios más representativos del neoliberalismo, todos conocidos colaboradores incondicionales del exgobernador Beltrones Rivera. Obvio: en consecuencia, la solución que brindan al problema de Isssteson es nuevamente la venta de bienes públicos para solventar los robos y el desfalco de los ladrones.

¿Cómo ves, Andrés Manuel, quieren vender varios bienes públicos, entre ellos el Estadio Héctor Espino en Hermosillo Sonora?

Absurdo de nuevo, la propuesta de rescate por parte del Gobierno del Estado es un falso rescate de índole neoliberal vendiendo bienes públicos para rescatar lo que ellos mismos llevaron a la quiebra.

Nosotros, mi familia y yo vivimos muy cerca del Estadio. Además del diamante, el espacio es hermoso, ofrece a los ciudadanos entre otras, amplias canchas de tenis, raquet, basquetbol y hasta una vieja alberca que abandonaron y que bien se puede reconstruir.

El Estadio Héctor Espino ofrece sobre todo la felicidad de asistir en familia y entre amigos a hacer deporte, ofrece una vida sana. Mira que querer venderlo…

No son los primeros con éstas intenciones, ya Padrés Elías lo quiso hacer en su sexenio; y es que se les hace agua la boca de ver aquel monumento al deporte y pretender convertirlo en uno más de sus bienes particulares.

Por otro lado,  también sabrás que existen denuncias contra exfuncionarios del mencionado Instituto Médico. Desfalcos, robo, malos manejos y cuanto gustes. En realidad vivimos una vida de falsa justicia entre políticos, pocas veces hemos conocido que esas denuncias beneficien al Instituto.

Lo que sí es muy conocido entre la derechohabiencia y la comunidad en general, Andrés Manuel, es que las farmacias subrogadas del Issstesosn, al menos muchas de ellas, -ya sabes, las que proveen medicamentos cuando no se tienen en el Instituto- pertenecen a familiares del actual Secretario de Salud en nuestro Estado.  

Hace poco, algunos derechohabientes y yo mientras platicábamos molestos por la falta de medicamento, allí mismo formamos un Comité Ciudadano pro Isssteson; en verdad no desaprovechamos oportunidad para hacerles saber lo molestos que estamos ante la crisis del Isssteson, por años hemos vivido en carne propia la locura de no encontrar medicamentos en sus farmacias, la inmensa tristeza al ver que adultos mayores no son tratados con dignidad ante sus demandas de salud, y en general la desorganización, el desabasto y el desinterés por la buena salud de la derechohabiencia.

Tienes toda la razón cuando dices que “se roban el dinero de la medicina, ese es otro huachicol que debemos resolver”.

De mi parte señor Presidente te tomo la palabra y ruego que intervengas en éste grave problema que aqueja a Sonora.

Para terminar, te confieso que cierro los ojos e imagino que lees ésta carta, por ello te hago saber que acá en mi casa, que es la tuya, cada mañana, cada día, mi esposo y yo, y mis hijas –que por cierto te llaman cabecita de algodón- vivimos tu honrosa presidencia. Como millones de mexicanos seguimos en la batalla por un México más justo, por una patria para todos.

Tú y tu familia reciban nuestro cariño siempre.

Por: María Dolores Rodríguez Tepezano.

Fb: www.facebook.com/mariadolores.rodrigueztepezano

Foto: Manifestación por fuera del Congreso Local, Hermosillo. De Silvia Núñez Esquer.